Página 34 de 58 • DAU 09/052 • Edición A
1.
Estructura soporte
2.
Montante de la subestructura de la hoja interior
3.
Refuerzo de esquina con cinta de malla
Figura 6.20:
Montaje de las placas de la cara exterior.
Entre los bordes de las placas (verticales y horizontales)
debe quedar una distancia de 3 a 5 mm necesaria para
realizar el tratamiento de juntas de exterior.
El atornillado se comenzará desde el centro de la placa
hacia los extremos con una separación entre tornillos de
250
#
3,5 mm y a no menos de 15 mm de los bordes de
la placa. La cabeza de los tornillos debe quedar
enrasada en la superficie.
Las placas no deben atornillarse a los perfiles en una
zona donde exista el cruce de un montante y un canal.
Las
juntas
verticales
entre
dos
placas
contiguas
tampoco
serán
coincidentes
sino
que
estarán
desfasadas aproximadamente la mitad de la longitud de
la placa.
El tratamiento de juntas se realiza con el mortero y la
cinta de malla de juntas de exterior.
En una primera mano, el mortero de juntas se debe
aplicar a lo largo de las juntas teniendo especial cuidado
en
que
el
mortero
penetre
bien
en
la
junta.
Posteriormente se coloca la cinta de malla a lo largo de
la junta y se repasa la junta con la espátula. Si fuera
necesario se pude realizar otra mano de mortero sobre la
junta.
En los encuentros con la estructura del edificio y en las
aberturas se debe realizar un refuerzo del mortero y la
cinta de malla. En el caso de las esquinas de las
aberturas, este refuerzo debe realizarse con al menos
500 mm de cinta de malla colocada a 45º.
6.3.7.
Aplicación del revestimiento exterior
Knauf
GmbH
España
dispone
de
instrucciones
específicas de cada producto en las que se describen
las
condiciones
de
mezcla,
amasada,
condiciones
climáticas de aplicación, consumos, tiempos de secado
y condiciones de seguridad. Estas instrucciones deberán
ser seguidas por los aplicadores de los componentes del
revestimiento exterior.
6.3.7.1
Capa de mortero base
Sobre la placa de la cara exterior y juntas se aplica una
primera capa de mortero base (véase el apartado 2.2.1)
de 5 a 7 mm de espesor mediante una llana dentada.
Esta capa de mortero se refuerza con la malla de
refuerzo del revestimiento (véase el apartado 2.2.2).
Esta malla se debe colocar sobre toda la superficie
comenzando desde las esquinas y evolucionando hacia
el centro. Esta malla se coloca embebida en el mortero
base cuando está fresco penetrando como máximo un
tercio de la capa de mortero base. El solape entre las
mallas de refuerzo debe ser de al menos 100 mm.
La capa de mortero base más malla de refuerzo se
deberá dejar secar al menos 8 días.
Posteriormente se aplica el acabado pétreo o el acabado
liso. Véanse los apartados 2.2.3 y 2.2.4.